Hay una diferencia entre tiempo y clima.
El tiempo cambia constantemente y es inmediato.
El clima es el patrón a largo plazo y más estable.
Nosotros transitamos en ambos simultáneamente. Desde el principio de los tiempos, hemos intentado entender el clima, y nos ha tomado tiempo.
Seguimos prestándole atención y, al observarlo desde hace cientos de miles de años.
Sin embargo, el tiempo no borró las huellas de nuestros intentos de interpretarlo, de conocerlo, en el presente podemos encontrar evidencias de que esta ciencia nos ocupa desde hace mucho más de 10.000 años.
Wurdi Youang, (Australia c. 11.000 a.C.)
Considerado uno de los observatorios astronómicos más antiguos del mundo, está alineado con los solsticios y equinoccios.
Wurdi Youang es un sitio arqueológico ubicado en el estado de Victoria, Australia, que se cree podría ser el observatorio astronómico más antiguo del mundo, con una posible antigüedad de más de 11.000 años.
Este asentamiento aborigen consiste en un círculo de piedras dispuestas en forma de huevo, con aproximadamente 100 rocas de basalto alineadas para marcar los solsticios y equinoccios.
Göbekli Tepe (Turquía, c. 9600-8000 aC)
Ubicado en el sureste de Turquía, Göbekli Tepe es un complejo sitio ceremonial con alineaciones astronómicas. Actualmente, se considera el templo más antiguo conocido y sugiere que la observación del cielo formaba parte de los rituales de sofisticadas sociedades agrícolas.
Algunos pilares, bellamente ornamentados, podrían estar orientados hacia la salida de ciertas estrellas y del Sol en momentos clave del año.
Tiempo y Clima
A los humanos nos llevó mucho tiempo descubrir los solsticios y los equinoccios, así como establecer las cuatro estaciones.
Comprender los ciclos lunares implicó descubrimientos tan importantes como el fuego o la rueda.
Predecir o pronosticar el tiempo, aún hoy, en un planeta monitoreado por constelaciones satelitales, es una tarea que desafía nuestro incipiente conocimiento e inteligencia.
Estamos en medio de una carrera contra el tiempo.
Él se mueve mucho más rápido de lo que podemos registrar, pues tiene un plan que aún no estamos logrando descifrar.
Vivimos en el tiempo: él marca el inicio y el fin de nuestra existencia en este breve lapso en el que transitamos por el planeta.
El clima, mientras tanto, tiene otros planes.

Fuente:
unesco.nl
Göbekli Tepe Project
Desde Wurdi Youang en Australia hasta Chichén Itzá, las civilizaciones han construido estructuras para estudiar los solsticios y equinoccios durante milenios.
Esto demuestra la importancia del conocimiento astronómico y meteorológico para la agricultura, la religión y la organización social.
A continuación una reseña organizada cronológicamente desde las estructuras más antiguas hasta las más recientes, enfocada en construcciones destinadas al estudio de solsticios y equinoccios en todos los continentes en la cual no hemos incluido a las grandes estructuras piramidales egipcias:
Wurdi Youang, (Australia c. 11.000 a.C.)
Considerado uno de los observatorios astronómicos más antiguos del mundo, está alineado con los solsticios y equinoccios.
Göbekli Tepe (Turquía, c. 9600-8000 a.C.)
Ubicación: Sureste de Turquía.
Posible función:
Sitio ceremonial con alineaciones astronómicas.
Algunos pilares podrían estar orientados hacia la salida de ciertas estrellas y el sol en momentos clave del año.
Importancia: Considerado el templo más antiguo conocido, sugiere que la observación del cielo formaba parte de los rituales de las primeras sociedades agrícolas.
Nabta Playa (Egipto, c. 7000 a.C.)
Ubicación: Desierto del Sahara, Egipto.
Círculo de piedras alineado con los solsticios de verano e invierno.
Podría haber servido como un calendario astronómico para predecir el inicio de las lluvias.
Importancia: Una de las primeras evidencias de astronomía aplicada en África.
Goseck Circle (Alemania, c. 4900 a.C.)
Ubicación: Alemania central.
Posible función:
Calendario solar con puertas alineadas con los solsticios de invierno y verano.
Importancia: Considerado uno de los primeros observatorios solares de Europa.
Mnajdra (Malta, c. 3600-2500 a.C.)
Ubicación: Isla de Malta.
Templo megalítico alineado con los solsticios de verano e invierno.
Durante los equinoccios, la luz del sol entra de manera precisa por la entrada del templo.
Importancia: Una de las estructuras más antiguas del Mediterráneo con alineaciones astronómicas claras.
Ziggurats mesopotámicos (Irak, c. 3000-2000 a.C.)
Los zigurats eran templos escalonados construidos por sumerios, acadios y babilonios. Aunque su función principal era religiosa, algunos estudios sugieren que su ubicación y alineación tenían una relación con el movimiento del Sol y las estrellas. Por ejemplo, el Ziggurat de Ur estaba alineado con ciertas constelaciones importantes para los sumerios.
Stonehenge (Inglaterra, c. 3000-1600 a.C.)
Ubicación: Salisbury, Inglaterra.
Marcador astronómico alineado con el solsticio de verano e invierno.
Posiblemente utilizado para rituales relacionados con las estaciones.
Importancia: Una de las construcciones megalíticas más icónicas con propósitos astronómicos.
Caral (Perú, c. 3000 a.C.)
La ciudad más antigua de América posee alineaciones arquitectónicas que sugieren que su población tenía conocimientos astronómicos. Se han identificado plazas y templos alineados con los solsticios y equinoccios.
Chankillo (Perú, c. 2300-200 a.C.)
Este conjunto de 13 torres en el desierto de Perú es el primer observatorio solar conocido de América. Las torres permiten seguir con precisión la posición del Sol durante todo el año, marcando los solsticios y equinoccios con una exactitud impresionante.
Taosi y el Observatorio de Dengfeng (China c. 2100 a.C. – 1000 d.C.)
Taosi (c. 2100 a.C.): En este sitio se encontró una plataforma circular con alineaciones astronómicas, que podría ser uno de los primeros observatorios solares en China.
Observatorio de Dengfeng (1276 d.C.): Aunque es más reciente, este observatorio construido por Guo Shoujing en la dinastía Yuan utilizaba alineaciones solares para medir con precisión los solsticios y equinoccios.
Harran (Turquía, c. 2000 a.C.)
Harran fue un importante centro astronómico en la antigua Mesopotamia. Aunque no se han hallado estructuras megalíticas específicas, los registros históricos indican que los astrónomos de Harran realizaban observaciones del Sol, la Luna y los planetas.
Kokino (Macedonia del Norte, c. 1900 a.C.)
Ubicación: Macedonia del Norte.
Plataforma de piedra con marcadores alineados con los solsticios y equinoccios.
Importancia: Reconocido por la NASA como uno de los observatorios astronómicos más antiguos.
Abu Simbel (Egipto, c. 1264 a.C.)
Este templo de Ramsés II fue diseñado de tal manera que, en los equinoccios, la luz del Sol ilumina las estatuas de los dioses en el interior, excepto a la del dios del inframundo, que permanece en la oscuridad.
Monte Miwa (Japón, c. 1000 a.C. – 300 d.C.)
Ubicación: Prefectura de Nara, Japón.
Posible alineación con eventos astronómicos.
Importancia: Considerado sagrado en la mitología japonesa.
Chankillo (Perú, c. 500 a.C.)
Ubicación: Costa norte de Perú.
Trece torres alineadas con el recorrido del sol a lo largo del año.
Posible uso como calendario solar.
Importancia: El observatorio solar más antiguo de América.
Asuka (Japón, c. 250-710 d.C.)
Ubicación: Región de Asuka, Prefectura de Nara.
Megalitos con posibles alineaciones solares.
Importancia: Indicios de conocimiento astronómico en la cultura japonesa temprana.
Chichén Itzá (México, c. 600-1200 d.C.)
Ubicación: Península de Yucatán, México.
La pirámide de Kukulkán proyecta una sombra con forma de serpiente en los equinoccios.
Importancia: Ejemplo de cómo la astronomía influía en la arquitectura y religión maya.
El Caracol (Chichén Itzá, México, c. 900-1000 d.C.)
Un observatorio astronómico maya con ventanas y corredores alineados con eventos solares y lunares clave, lo que les permitía predecir estaciones y eclipses con precisión.
Xochicalco, México (c. siglo VIII d.C.)
Este sitio mesoamericano incluye estructuras utilizadas para observar el paso del Sol por el meridiano
Jantar Mantar (India, 1724 d.C.)
Un complejo de observatorios astronómicos construidos por el maharajá Jai Singh II en varias ciudades de la India. Incluye enormes instrumentos de piedra diseñados para medir la posición del Sol, la Luna y los planetas con gran precisión.
Monte Fuji y su relación con el Sol

El Monte Fuji ha sido considerado sagrado durante siglos.
Durante los solsticios y equinoccios, su silueta crea espectáculos solares que han sido observados y celebrados desde tiempos antiguos.
El fenómeno del “Diamante Fuji”, cuando el Sol se alinea perfectamente con la cima del monte, es un evento natural que ha sido venerado en la cultura japonesa.
En Japón no se han encontrado estructuras megalíticas tan antiguas y evidentes como Stonehenge o Chankillo para la observación de solsticios y equinoccios. Sin embargo, hay varios sitios arqueológicos e históricos que sugieren que los japoneses antiguos tenían conocimientos astronómicos y realizaban observaciones del cielo.
Monte Miwa y su relación con la astronomía (c. 1000 a.C. – 300 d.C.)
El Monte Miwa, en la prefectura de Nara, es considerado un lugar sagrado en el sintoísmo primitivo. Algunos estudios han sugerido que su alineación con el amanecer y atardecer en los solsticios podría haber tenido un significado astronómico y ritual para los antiguos japoneses del período Yayoi (300 a.C. – 300 d.C.).
Ishi-no-Hoden (período Kofun, c. 250-538 d.C.)
Es una misteriosa piedra monolítica en la prefectura de Hyogo. Algunos investigadores creen que pudo haber tenido un propósito astronómico o ritual vinculado con la observación de fenómenos solares.
Asuka y los “kofun” (c. 250-710 d.C.)
En la región de Asuka hay antiguas tumbas y estructuras de piedra, algunas con posibles alineaciones astronómicas.
Ishibutai Kofun, una tumba megalítica cuya entrada podría estar alineada con eventos solares.
Sekibutsu y otras formaciones de piedra que han sido interpretadas por algunos como posibles marcadores astronómicos.
Santuarios y templos con alineaciones solares
Varios santuarios sintoístas y templos budistas en Japón están orientados en función de la trayectoria del Sol.
Santuario de Ise: aunque su alineación exacta no está confirmada, su reconstrucción cíclica cada 20 años refleja una profunda comprensión de los ciclos naturales.
Templo Hōryū-ji: Algunos investigadores han señalado la posibilidad de alineaciones con el solsticio en su estructura.
Durante el período Heian (794-1185 d.C.), la astronomía china influyó en Japón, y los astrónomos de la corte registraban eclipses y solsticios.
En el período Edo (1603-1868 d.C.), se construyeron observatorios más avanzados, como el Seimei Jinja, dedicado al astrónomo y adivino Abe no Seimei.
Nos tomó mucho tiempo el tiempo.
Desde hace poco tiempo nuestra mirada está en el Clima.
Continuará